El presidente Daniel Noboa aseguró que las carreteras bloqueadas por las movilizaciones del paro nacional serán abiertas entre el 22 y 23 de octubre y anunció un plan de apoyo económico para quienes resultaron afectados por los cierres viales.
Declaraciones del presidente
Noboa afirmó que el traslado temporal de la sede de la Presidencia a Latacunga permitió proteger a Quito y evitar que las protestas se concentren en la capital, y dijo que el Gobierno está dispuesto a abrir las vías con medidas más enérgicas si es necesario. El mandatario señaló que el cierre de rutas ha afectado a comerciantes, productores y usuarios de transporte y que destinará recursos para la reactivación de los sectores perjudicados.
Medidas anunciadas
El Ejecutivo anunció un programa de reactivación económica con recursos dirigidos a las “víctimas” de las manifestaciones violentas, incluyendo apoyo a pequeños comerciantes y productores cuyos medios de transporte o mercancías fueron dañados. Además, el Gobierno movilizó operativos para reabrir carreteras y enviar convoyes humanitarios con apoyo logístico y seguridad en zonas donde persisten los bloqueos.
Reacciones y contexto
Analistas advierten que, aunque la intervención estatal puede recuperar el control temporal de rutas, la resolución del conflicto dependerá del manejo político y de la respuesta de las comunidades movilizadas; algunos expertos estiman que el paro podría prolongarse pese a la ofensiva gubernamental.
Consecuencias y perspectiva
El anuncio presidencial refuerza la hoja de ruta del Ejecutivo para recuperar movilidad y proteger la actividad económica en las provincias afectadas mientras el país enfrenta el desafío de combinar medidas de seguridad con canales efectivos de diálogo para evitar nuevas escaladas de violencia.