La NASA reveló este miércoles un descubrimiento que podría marcar un hito en la exploración espacial: el róver Perseverance encontró en Marte indicios de vida microbiana antigua, en una muestra de roca recolectada en el cráter Jezero, zona que hace miles de millones de años habría albergado agua líquida.
¿Qué se encontró?
La muestra, bautizada como “Cheyava Falls”, contiene nódulos minerales que podrían haberse formado por procesos químicos prebióticos o microbianos, ambos relacionados con la vida. Aunque no se trata de vida actual, los científicos consideran que es “lo más cerca que hemos estado de descubrir vida antigua en Marte”, según Nicola Fox, administradora asociada de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
¿Por qué es importante?
Este hallazgo refuerza la hipótesis de que Marte pudo haber sido habitable en el pasado. El cráter Jezero fue elegido precisamente por su geología, que incluye antiguos lechos de ríos y depósitos sedimentarios. Las muestras serán traídas a la Tierra en la próxima década como parte del proyecto Mars Sample Return, en colaboración con la Agencia Espacial Europea.
Reacciones científicas
La comunidad científica internacional ha recibido la noticia con entusiasmo, aunque con cautela. “Es una señal residual, una posible biofirma”, explicó Fox, subrayando que aún se requieren análisis más profundos para confirmar si los compuestos hallados tienen origen biológico.
Este avance se suma a los esfuerzos globales por responder una de las preguntas más profundas de la humanidad: ¿estamos realmente solos en el universo?