El presidente Daniel Noboa advirtió que cualquier persona que intente privar de agua a comunidades campesinas y ponga en riesgo el riego en zonas rurales será denunciada por terrorismo y enfrentará hasta 30 años de prisión, durante un acto de entrega de tractores e incentivos agrícolas en la provincia de Chimborazo.
Noboa instruyó a la ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, a “revisar junta de agua por junta de agua” para garantizar que ningún líder gremial presione a los productores quitándoles el riego o incitándolos a paralizaciones que dañen la gestión pública.
El mandatario defendió además la eliminación del subsidio al diésel, vigente desde el 13 de septiembre, y señaló que los aproximadamente 1 100 millones de dólares anuales ahorrados serán destinados a programas sociales y al Bono Raíces, una ayuda de 1 000 USD para pequeños productores que ya ha beneficiado a cerca de 70 000 familias y llegará a otras 30 000 en los próximos días.
Estas declaraciones se producen en medio de bloqueos viales y protestas de transportistas, comunidades indígenas y sectores campesinos en provincias como Carchi, Imbabura y Pichincha, que han afectado la movilización y el suministro de agua en varias zonas rurales del país.